me dicen algunos personajes respetables receptores de mails que escriba
a lo que respondo que sólo sé escribir mails
mientras para mis adentros pienso que si para una audiencia restringida a un destinatario ya me lleva el tiempo que me lleva escribir algo no digamos digno pero por lo menos mínimamente comprensible, ligeramente editado y no esta disgresión tras disgresión que se solapa intersecta superpone precipita recomienza incesante que es mi discurso interno.... pues que ni quiero imaginarme públicos mayores, ni empezar a pensar en algo así como ya sólo la palabra público y su nivel de generalidad, cómo eso acerca la tarea de crear una definición y peor aún sostenerla más tiempo que el que tarda la próxima disgresión en llegar a la cabeza... el trabajo de frenarla. o de escribirla. escribirlas todas y después reflexionar sobre cada una y sobre su sucesión y las relaciones entre ellas y... y yo estoy tratando de hacer arte con cierta consecuencia y realmente no sé si la palabra también no será mucho, che, muchachos...
y por otro lado... qué tentación
lo último que estuve escribiendo fue el índice de mi biografía, gracias a kacerito, que trajo la idea al st moritz
cópiense que está bueno
(y mirá, justo, cippodromo empieza hablando de índices!)
No hay comentarios:
Publicar un comentario